Tratamiento psicológico para niños y adolescentes
La terapia infantojuvenil es un enfoque especializado que se adapta a las necesidades emocionales y psicológicas de los más jóvenes. En nuestro centro, entendemos que cada niño y adolescente atraviesa diferentes etapas de desarrollo, por lo que utilizamos técnicas específicas como juegos, dibujos, muñecos, y otras herramientas terapéuticas para trabajar en su bienestar emocional.
Proceso Terapéutico para Niños y Adolescentes
1. Primera sesión con padres o cuidadores
En la primera consulta, nos reunimos con los familiares del niño/a para recopilar información clave sobre las preocupaciones emocionales y conductuales. Esta sesión es esencial para entender el contexto familiar y el motivo de consulta, por lo que es importante que los adultos acudan solos en esta ocasión.
2. Evaluación inicial con el niño/a o adolescente
Tras recoger toda la información necesaria, se programa una evaluación inicial con el niño o adolescente, en la que comenzamos a identificar sus necesidades y a desarrollar un plan terapéutico adecuado.
3. Sesiones terapéuticas individuales y familiares
Las sesiones se enfocan en trabajar con el niño o adolescente, mientras que los padres y cuidadores son citados periódicamente para recibir retroalimentación y recomendaciones sobre cómo apoyar el proceso desde el hogar. También colaboramos con la escuela en caso de ser necesario.
4. Seguimiento y evaluación del progreso
Cuando se han alcanzado los objetivos terapéuticos, las sesiones se espacian gradualmente. Realizamos un seguimiento constante para evaluar los avances y determinar cuándo es adecuado dar el alta terapéutica.
Las sesiones de terapia infantojuvenil suelen tener una frecuencia semanal al principio del tratamiento, y su duración es de aproximadamente una hora. De estos 60 minutos, 45 están dedicados al niño o adolescente, y los últimos 15 minutos se emplean para hablar con los padres o cuidadores.
50 € por sesión
Nuestro enfoque se basa en la psicoterapia integradora y personalizada, ajustada a las necesidades únicas de cada niño o adolescente. Al trabajar con una variedad de herramientas terapéuticas y colaborar estrechamente con la familia y la escuela, garantizamos un acompañamiento integral que favorece el desarrollo emocional y psicológico de los más jóvenes.